Situado al sudoeste de la provincia de Valladolid, en la margen izquierda del río Duero, Castronuño representa no sólo un cruce de caminos, por su cercanía a tres capitales de provincia —Valladolid, Salamanca y Zamora— y otros grandes núcleos poblacionales de la provincia de Valladolid como Tordesillas y Medina del Campo, sino también un entramado de sendas que recorren su término, enclavado en la única reserva natural de la provincia de Valladolid.
Las Riberas de Castronuño, junto con el embalse de San José, hacen de Castronuño un pueblo singularmente verde y escarpado dentro de la planicie de esta provincia castellana. Esta particularidad orográfica hace que todo su término sea un destino apetecible para aquellas personas amantes de las rutas y los paseos en contacto con la naturaleza.
La Senda de Los Almendros, en pleno corazón de la reserva natural, es la reina de las rutas del municipio. Se trata de una ruta circular de 3,4 km de dificultad Media-Baja, ideal para todas las edades y para el turismo familiar. Su época de máximo esplendor coincide con la floración del almendro, el árbol que primero florece para avisarnos de la llegada de la cálida primavera. El invierno, por el avistamiento de aves; el otoño, por la gran variedad de colores, y el verano, porque curiosamente es su momento más verde, convierten a este bello paraje en un lugar único para pasear en cualquier estación del año.
Tras esta visita, seguro que te apetece regresar y tal vez sea la ocasión perfecta para adentrarte por numerosas sendas complementarias, otras de mayor recorrido, o incluso sendas cicloturistas, como la de la Cañada o el Eurovelo, procedente de Europa.
Senda de los Negrillos, de los Pescadores, del Ferrocarril, del Arroyo del Caño, de la Fuente de la Salud, Ruta de la Pitanza, al mirador de Peñarrubia y otras tantas, incluido el GR-14, que enlaza con Tordesillas o el Camino de Santiago de Levante GR- 239, forman parte del entramado de sendas que atraviesan el término de Castronuño como si de una tela de araña se tratase. Podrás encontrarlas perfectamente descritas en la página web del ayuntamiento, acompañadas de un mapa y de un código QR que facilitan su recorrido.
Para descansar de estas caminatas y como recompensa merecida, puedes deleitarte probando su gastronomía típica, entre la que se encuentra el Mollete, un bollo dulce anisado, su queso artesano, a los que podrás acompañar con los caldos de las tres bodegas del municipio.
Castronuño es también un pueblo con historia y con un patrimonio arquitectónico de gran valor, destacando las escuelas municipales y la iglesia de Santa María del Castillo (SXIII), una joya del románico tardío zamorano en la provincia de Valladolid.
Castronuño y su Reserva Natural Riberas de Castronuño-Vega Duero es pues un destino cercano a tener en cuenta en tus próximas escapadas.
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